Thursday, May 08, 2025

Poeta en Bogotá

 Pasaba entre su abrigo gris, ese donde siempre habitaba, lo hacía frente a la casa por la misma calle de las protestas y las carreras de los estudiantes universitarios perseguidos por la policía con sus agresivos cascos y sus gases de las lágrimas, eran los mismos estudiantes de la canción, aquellos que por un fragor de místico periodo juvenil fueron dueños interinos de varias manzanas a la redonda, insistiendo en la vida y en la educación. Los gritos a coro, los grafitis y las pancartas hablaban de lo mismo y reclamaban derechos que aún hoy, después de cincuenta años siguen siendo negados; es posible que el poeta anduviera fraguando versos o simplemente contemplara el mediodía o tal vez las flores de los antejardínes de la época. 

Su cuerpo grande se desplazaba sin prisa por el vecindario con una bufanda al cuello para apaciguar las palabras que seguramente querían escapar de pronto. Su escaso cabello blanco se ensortijaba levemente levantándose rebelde hacia los lados. 

El hombre caminaba buscando nombrar la flor para su pecho, la margarita o la rosa enajenada, siempre persiguiendo la quimera de un aire puro, de un racimo de agua para calmar la sed de su ninfa deseada y yo lo veía pasar imaginando que él pensaba en Teresa y su frente que abarcaba el helado y azul tapiz de la sabana o que escudriñaba en la pausa de sus pasos un motivo para, al llegar al insomnio de su casa, entintando su pluma enamorada, escribir a piedra y cielo algún nuevo poema embelesado.

Friday, May 02, 2025

 Cuentos breves

 

 

I

Sin absolución 

 

Clarita buscó durante meses en las iglesias de su ciudad, sin conseguirlo, el perdón a su pecado, unos meses después con una sonrisa angelical y unos enormes ojos nítidos como los que la enamoraron, nacía la culpa de Clarita.

 

II

La madrina 

 

Cuando en las noches llegaba ebrio, le declamaba con dramática grandilocuencia largos versos de amor hasta perder la voz, luego, amorosamente, según su decir, le pedía que caminara descalza con ligeras ropas de dormir mientras le tiraba violentamente su cabello y le azotaba el cuerpo con un cinto de cuero por el amanecer de las empedradas calles, conduciéndola hacia la gran plaza desierta, en la ciudad helada donde habitaban y ahí, ahogada en sangre y llanto, la dejaba tirada.

 

II

Janet mira sus ojos en un pequeño espejo de mano, no quiere hacerlo en otro grande que hay en el baño. Recuerda la última noche, la llegada del padre, la mirada turbia y un primoroso frasco verde con gotero que guardó en su bolsillo antes de partir. Después mientras todos navegaban un sueño profundo, el fuego lamió y devoró sus carnes provocando aterradores gritos, solo ella se salvó, sus hermanos y su madre no. Ella no mira al espejo, no por no ver las deformidades de su rostro y su cuello, sino porque detrás de ellas cree adivinar los rasgos del asesino.

 

IV

AR-15 

En el cruce del semáforo, mientras cambiaban las luces que daban vía al congestionado tráfico, el poeta detuvo un segundo la mirada y lo inundó la cascada escarlata de un flamboyán, del auto que lo seguía se bajó un energúmeno que dejó como alaridos, tres brutales agujeros, deteniendo

para siempre la felicidad de su plácida sonrisa y dejando el tono del flamboyán inundando sus pupilas.

 

 

V

 

 

Deseos secretos 

 

De pronto se encontraba con malos pensamientos como dirían las monjas, su mamá y el cura, imaginaba al enfermo dentro de un burdo cajón montado en una cinta como la del aeropuerto que arrastra en círculo las maletas, esta vez con el equipaje camino al crematorio. Sacudía la cabeza, se acercaba con una compresa que ponía sobre la afiebrada frente del hombre y lo besaba en la boca.

 

 

 

VI

Inteligencia artificial

 

Emocionada, portando un libro en la mano y con su pecho erguido e inflamado, la famosa escritora, muy orgullosa asciende las gradas. Ella atrae todas las miradas, pero al alcanzar la cima, tropieza y cae estrepitósamente. Con la fuerza colosal del golpe, su pecho se deshace en una baba espesa que ensucia el traje de fiesta; su libro se desbarata en letras que se van acomodando en las paredes y los peldaños de la escalera creando una nueva historia. El público de pie, aplaude emocionado.

 

VII

Regalo

Cuando destapó la caja, una rata enorme se había comido al gatito y saltó sobre el cumpleañero mordiéndolo en la yugular.

 

 

Midaz.

 

 

 

 

 

VIII

Traición 

 

Te amo hasta la muerte, le dijo y la besó en la boca, antes de caer al suelo, alarmados comenzaron a arremolinarse los compañeros. Ella se inclinó conmovida, su amado se había disparado accidentalmente en un pie. Un helicóptero que había llevado avituallamiento tras varias estratégicas paradas, lo retiró ensangrentado en una improvisada camilla y la hermosa, con lágrimas en los ojos lo vio alejarse de la selva donde luchaban. No tardaron las bombas que ya con su objetivo claro, acabaron con la tristeza de la mujer enamorada y el estupor de quienes se habían camuflado en la inexpugnable espesura durante largo tiempo, huyendo del ejército al que combatían en incursiones relámpago. Ella con el beso aún tibio entre sus labios, quedó tendida sin rostro en medio de los matorrales.

 

 

Monday, April 21, 2025

El mago electrónico

Nacer entre montañas atrapa el alma, decía Manolo, aunque luego se habite lejos de ellas, allí cerca de las nubes sigue alojado el corazón rebelde, el que nació limpio y se contaminó; al chino Vladi le pasó y nos pasó a todos los que quisimos cambiar el mundo, los cerros se apoderaron de nuestra voluntad y hubo que, con dolor romper el yugo para avanzar, eso implicaba enfrentarse al mundo, abandonar a los hermanos y a la mamá, discutir a fondo con el papá que definitivamente era el que más estaba aferrado a esos cerros donde vio nacer a sus hijos, morir a su padre y a su madre y convertirse en piedra sus afectos. Todos lo ignoraban, pero eran presa de ese embrujo geográfico que primero los aprisionaba y si acaso lograban escapar, lo llevaban a cuestas y si para su infortunio regresaban, no los dejaba respirar con un apretamiento del pecho que se convertía en insoportable peso que dañaba su corazón y su juicio, por eso muchos se negaron a volver.  

El chino Vladi escapó varias veces, pero terminó regresando. Una vez lo hizo con imágenes aterradoras que vio en una guerra de la cual quiso ser partícipe y que le llenó la cabeza de un horror que lo mantuvo al margen por el resto de su vida, entonces caminaba, hablaba y planeaba, pero no realizaba nada porque también permanecía con aquellas almas de piedra que lo circundaban siempre; todos ellos, los de ahora y los de entonces seguían inmersos en el marasmo de las rocas que los acorralaron durante siglos de minerales y silencio milenario. Era la maldición de los mayores que allí fueron maltratados y enterrados. Todos vivían ignorándola y negándose a verla, hasta que un día su aire cesó, la respiración lo abandonó y el chino Vladi se marchó, mientras en el recuerdo sigue la historia del juego infantil del Mago electrónico que descifraba entuertos y con su imán señalaba en la respuesta sus conclusiones, el juego de esa casa tenía una muy especial agregada a mano por quienes como Manolo querían a su inseparable compañero de aventuras, entonces a la pregunta sobre cómo era el amigo, el mago daba sus vueltas atraído por el imán y contestaba…

 ‘El chino Vladi es buena gente’

Thursday, March 27, 2025

Males modernos


La inteligencia se nota, salta a la vista, no se puede esconder, sobre todo si es inteligencia artificial.


Está de moda la inteligencia artificial, se puede usar en cualquier actividad humana, es interesante en la medicina, en las estadísticas, en la programación de vías de transporte, en la predicción del tiempo, de las cosechas y en la producción. En la matemática de las distancias de viajes interestelares, en las cirugías complicadas en aparatos y prótesis para personas desvalidas, ahí la amamos y nos parece el gran paso de la humanidad.

La inteligencia artificial tiene vigencia y merece respeto en la ayuda científica y en todos los campos donde represente un avance colosal y nos inclinamos ante ella en esos territorios y entendemos que sea usada hasta para organizar las vacaciones, aunque quita el placer de los descubrimientos en un momento tan excitante como escoger destinos, sitios históricos o sencillamente dar un paseo por calles que pisaron emperadores, damiselas y ejércitos; lugares que recibieron la sangre de las batallas, las hogueras impías, que conservan en el tiempo los lamentos de los crucificados o los pétalos de los enamorados. 

Es posible que en algún caso extremo tengamos que recurrir a esa modalidad sin sentimientos, algo así como a un mapa que habla, –en una mente cuadrada puede no ser tan malo– a un elemento que maximiza el tiempo de disfrute con una agenda perfectamente organizada que, creo es de lo que se huye cuando de descansar y conocer se trata. 

Nos estamos robotizando a pasos agigantados, pero en esta era de información por toneladas, es posible que algún día, irremediablemente y para simplificar, caigamos en este monstruo que por ahora intenta seducirnos sin resultado.

Lo que sí es grave y lamentable de esta inteligencia, es el uso indiscriminado en el área de las humanidades, nos molesta, por ejemplo, el descubrimiento de algunos personajes que antes considerábamos escritores y que ahora comprobamos que no habían alcanzado tan alto vuelo, porque de la noche a la mañana se transformaron en artificiales poetas repetitivos, olvidando su esencia y estilo natural que por sencillo y espontáneo fue quizás más ameno y apetecido que el que ahora ostentan. 

¿A quién creen que engañan?

La inteligencia artificial para quienes escriben es una farsa que anquilosa el cerebro y mata el placer de buscar la palabra precisa, la manera perfecta de definir lo que se está contando. Es un ropaje barato que tarde o temprano se rasgará ante los atónitos ojos de los lectores.  La inteligencia artificial es la faja que asfixia a las señoras que pretenden guardar sus carnes entre ellas, son los senos postizos que producen dolor en la espalda de quienes los portan y terminan siendo inconvenientes con la salud dentro de un organismo que sabe que son cuerpos extraños y los rechaza constantemente. La inteligencia artificial es momentánea para lucir un maquillaje exagerado y común entre los usuarios que les pondrá los mismos rasgos que a los demás y que al cabo del tiempo se correrá porque no forma parte de la estructura física, menos cultural ni mental de quienes la usan. Son millones de datos robados a personas que se esforzaron en la creación y que aportaron realmente al gran bagaje de la escritura universal.  

Tal como van las cosas… ‘lo que ahora vas a oír no te asombre’, se irá imponiendo esta modalidad y el público se arremolinará para aplaudir con furor a los nuevos poetas artificiales.  


Thursday, March 20, 2025

OFICIO DE POETA

 

Podría convertirme 

en sal 

diluirme 

en agua 

abarcar el espacio 

de las olas y 

el letargo marino 

al mediodía 

del sol canicular 

que besa

con fruición 

la piel cansada 

extraviarme 

entre algas 

y entre peces 

que se deslicen 

veloces para darme 

paso en su

camino 

sin rumbo ni destino

entre las

insondables profundidades 

donde ya no es azul 

el mundo 

y solo reverberan 

las escamas 

de las honduras 

que oscurecen 

los ojos laterales 

saliéndose de órbita 

en su afán de explorar. 

Adentrarme 

en los rugidos 

del agua 

con gritos de sirenas

y de ahogados

quisiera

llorar desde dentro 

desde su propia 

entraña milenaria

y

declararme muerta 

en los confines 

tenebrosos 

de montañas y 

rocas por siglos y

por eras sumergidos

en la noche más noche 

en la noche más larga. 

Puedo

Wednesday, March 12, 2025

Canciones y cucarachas


¿Cómo podríamos haber sabido del Caballero de París, de la tristeza del jibarito o de la pollera de la negra Soledad; del son tristón canción de amor de la vieja molienda o de la voracidad de María de los guardias, sin la magia de los compositores de las canciones que nos los describieron?

¿Cómo imaginar una vereda tropical sin su perfume de humedad o el rumor que se cuela entre las olas que vienen y van o una noche de luna en Chapala?

¿Cómo saber del canto de pescadores que arrulla el mar en las noches de Veracruz, o de un paseo del puente a la alameda con aromas de mixtura que en el pecho llevaba la flor de la canela? 

Imposible soñar con ser emperatriz de Lavapies en Madrid sin Agustín Lara o cerrar los ojos e imaginar el Mediterráneo de Algeciras a Estambul, vivo en la niñez de Serrat. 

¿Cómo evadir y reemplazar esas imágenes que colmaron nuestra imaginación y acompañaron nuestra infancia y adolescencia?

Nos nutrimos de esos sueños a través de la radio y los cantos de tías y abuelas. 

Evocamos paisajes, amores, dolores y penas ajenas, pero nos humanizamos en el trayecto.

Me pregunto ¿qué les quedará a las generaciones que nos sucederán, si lo nuevo se basa en descripciones grotescas y sonidos semejantes, algunas veces sin articulación de palabras?

¿Qué imágenes se formarán nuestros nietos con la letra de la música de ahora, que difícilmente se puede calificar de ‘lírica’ porque parece un irrespeto a dicha expresión poética? 

En fin, cuando sobrevivan las cucarachas y se forme una nueva especie, encontrarán tal vez algunos vestigios en los desechos de silicona, basura y plástico que ahogan los océanos porque estos que somos, habremos sido cremados y ni polvo de estrellas para la posteridad quedará para nombrarnos en el universo que destruimos.


MIdaz

Thursday, February 27, 2025

Desvaríos de un reyezuelo

‘El Estado soy yo’


Todo se dio paso a paso, colocando las fichas adecuadas en el tablero los copartidarios comenzaron a poner al país en jaque. No fue cosa de un momento, han sido años de conspiración y de montaje, –hasta el pelucón del hombre fue modificado–, de la misma manera ubicaron jueces, impidieron el nombramiento cuando correspondía a sus opositores en el tribunal supremo y en cambio nombraron los propios cuando parecía imposible, de esta forma cuentan con sus mejores aliados para utilizarlos en momentos cruciales de legalidad si acaso las actuaciones se salen de control. 

No estamos ante hechos casuales, el individuo cayó como anillo al dedo de los planes de retroceso urdidos con filigrana, con tiempo y con cautela. 

El mercachifle sin principios, sin ética, sin formación académica, sin ascos apareció en escena en el momento indicado. 

Todo lo que brille le gustará, se dijeron y brillo le han dado. 

Su ambición y su mal gusto nos los ha mostrado. Lo hemos visto batiendo su cola, olfateando y abriendo huecos con sus patas en busca del hueso del tesoro.

… y ¡lo encontró!

Ahora actúa sin freno y los que lo alimentaron callan, arrasa con lo establecido y lo que aún no ha podido cristalizar en la realidad le pide a su mecenas que lo cree con inteligencia artificial. 

De esta manera le es fácil satisfacer su ego; manda fabricar vídeos con sus delirios que muestran una estatua gigante de su impúdica figura resplandeciente en oro, presidiendo balnearios que como bofetada a los muertos, a la historia y a las luchas de un pueblo subyugado, pretende construir sobre las ruinas de los bombarderos. 

El hombre sueña en sus insaciables desvaríos de coronada grandeza, con leer su nombre en los portones de hoteles propios, aunque todos sus proyectos del pasado hayan fracasado y caído en bancarrota. 

Él alucina con banquetes –el rey de la hamburguesa – con invitados macabros, lo hace porque ahora tiene los  recursos y se ha vendido al reflejo del más poderoso, olvidando la máxima de que no todo lo que brilla es oro, pero ahí sigue, desmantelando un país y sus instituciones, mancillando, humillando a necios y eruditos, pisoteándolos a todos como un animal gigante, como el elefante en la cristalería donde temerosos le ceden el paso para no correr con la misma suerte de quienes se le oponen y mueren aplastados. 

Solo uno, gracias a su investidura tímidamente se atrevió a tocarle el brazo para insinuarle que estaba mintiendo y para pedirle rectificar las cifras inventadas en el momento de lanzarlas. El extranjero no quería verse involucrado; el improperio, la mentira y la improvisación le asustaron aunque en esta tierra al otro individuo se lo acepten, tocó su brazo insinuándole que esas no son buenas tácticas y no se ven bien en el ámbito de la política internacional.  

Mientras tanto el país y el mundo toman aire aguardando el siguiente cristal quebrado en la jugada y el tal vez de un buen consejo de algún otro que se atreva a tocar nuevamente su brazo y lo despierte de su desvarío mostrándole que en la exhibición de su alucinación se le ve el cobre y se le rasga la tela.

Midaz

La Fiesta de la Friducha

Poeta en Bogotá

  Pasaba entre su abrigo gris, ese donde siempre habitaba, lo hacía frente a la casa por la misma calle de las protestas y las carreras de l...