Monday, August 07, 2023

Pinocho

El genio en la vereda

Cuánto conocimiento, poesía, arte, política y amores frustrados yacen en la acera de ese poblado canalla, inspirando mendrugos que le tiran los transeúntes.
Cuánto genio abandonado de recuerdos y sentimientos, asaltado por pesadillas que lo empujan con manos viejas y temblorosas desde un fantasmal prostíbulo hasta el fondo del abismo que dice, le torció la cerviz.
Así era mi Pinocho, pero no le crecía la nariz porque albergaba la verdad en su febril cerebro y en las saetas que fabricaba en un instante y lanzaba a incautos que pretendían engañarlo con sus arrogantes poses intelectuales, ignorando que a él no se le podía mentir, porque miraba más allá de la historia y los análisis triviales; que él lo sabía todo y, tendencioso tiraba mordaces cáscaras de conocimiento para que se resbalaran los mediocres.
¡Cómo nos divertíamos con sus brutales y magistrales definiciones e interpretaciones! 
¡Cuánto aprendíamos de él!, cuando poniendo a cada uno de los que lo ofendían, en el lugar exacto que les correspondía; los calificaba implacable desde su singular sabiduría.
¡Ay, mi Pinocho!
No sabes de tu orfandad total porque es posible que estés muerto; porque ya tus ojos tal vez solo ven las sombras de las figuras que alguna vez pasaron por tu vida, desde la caverna que habitas en tu platónico sueño extraordinario.
No sabes que te evoco, que te evocamos requiriendo tu genio y tus pilatunas, como cuando consumías a hurtadillas y sin tregua cinco litros del helado que te escondíamos y que te dejaban la cara y la ropa pintada como la de un travieso chiquillo cuando era sorprendido en el acto de glotonería.
¿Dónde estás mi Pinocho?
¿Dónde tu genio y tu figura inconfundibles?
¿Dónde tus rabietas, tus bravos puños y tus alucinaciones?
Donde quiera que estés, Pinocho abandonado, abrazo tu pequeño cuerpo de madera, tu cuerpo de cartón, el mismo que contuvo a un hombre gigante que no supo ser apreciado por nadie, y desapareció en las calles de un pueblo triste que, según dicen los expertos, no figura en ninguno de los mapas de la geografía nicaragüense donde ya nadie te cuida ni te atiende.

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